Artritis psoriásica: Cuando tu piel avisa que tus articulaciones están en peligro

Dra. Elena Vargas, médico colegiada especialista en dermatología quirúrgica, estética y venereología
Dra. Elena Vargas
31/7/2025
artritis psoriásica

Hasta el 30% de los pacientes con psoriasis van a desarrollar artritis psoriásica. Esta consiste en una enfermedad inflamatoria crónica que suele aparecer en pacientes con psoriasis previas, pero en ocasiones, hay pacientes que desarrollan artritis psoriásica sin presentar lesiones en la piel.

Si tienes psoriasis y últimamente sientes que tus articulaciones "no están bien", este artículo puede ser revelador. Porque hay algo que muchos pacientes no saben: tu dermatólogo puede ser la primera línea de defensa contra una enfermedad que va mucho más allá de la piel.

Como dermatóloga experta y directora de la clínica Dermaniac en Madrid, lo veo constantemente: Pacientes que vienen por sus placas de psoriasis y casualmente mencionan que les duelen las manos por las mañanas. Esa 'casualidad' puede ser la clave para detectar artritis psoriásica años antes de que cause daño irreversible.

¿Qué es exactamente la artritis psoriásica y por qué tu piel tiene la clave?

La artritis psoriásica es una enfermedad autoinmune donde el sistema inmunitario ataca erróneamente tanto la piel como las articulaciones, causando inflamación crónica que puede llevar a generar un daño permanente articular si no se trata adecuadamente.

Para entender la artritis psoriásica, primero hay que entender que la psoriasis nunca fue "solo una enfermedad de la piel". Es una enfermedad sistémica, inflamatoria, donde el sistema inmune está desregulado. Esa desregulación puede manifestarse en la piel (lo más visible), pero también en las articulaciones, y ahí es donde entra la artritis psoriásica.

Imagina tu sistema inmune como un ejército que debería protegerte. En la artritis psoriásica, ese ejército recibe órdenes equivocadas y ataca tus propios tejidos. En la piel provoca las placas características de psoriasis, mientras. que en las articulaciones causa inflamación, dolor, y con el tiempo, destrucción del cartílago y del hueso.

Lo fascinante (y frustrante) es que no hay un patrón fijo. Algunos pacientes tienen psoriasis severa con artritis leve. Otros, psoriasis mínima con artritis severa. Incluso hay casos donde la artritis aparece años antes que las lesiones cutáneas, complicando el diagnóstico.

La conexión molecular que lo explica todo

A nivel molecular, tanto la psoriasis como la artritis psoriásica comparten vías inflamatorias comunes. Citoquinas como el TNF-alfa, la IL-17, la IL-23…son nombres complejos que representan las "señales de ataque" que causan inflamación. Por eso los mismos tratamientos pueden mejorar tanto la piel como las articulaciones.

Cuando veo a un paciente con psoriasis, no solo miro la piel. Busco señales sutiles de afectación articular. Un dedo ligeramente hinchado, cambios en las uñas, rigidez matutina que el paciente ni menciona porque piensa que es 'normal'... Son pistas que pueden cambiar completamente el manejo de la enfermedad.

Ante la sospecha de artritis psoriásica el paciente debe acudir a un reumatólogo para valoración.

Por qué aparece psoriasis artrítica

Sí, hay componente genético. Si tienes familiares con psoriasis o artritis psoriásica, tu riesgo aumenta. Sin embargo, los factores ambientales juegan un papel crucial:

  • El estrés crónico. No es la única causa de la enfermedad, pero en personas genéticamente  predispuestas, tras episodios o eventos estrasantes importantes como  divorcios, pérdidas laborales, duelos puede aparecer psoriasis en placas o artritis psoriásica.
  • Infecciones como faringitis por estreptococo pueden desencadenar la respuesta autoinmune que provoque una brote de psoriasis en gotas.
  • Traumatismos, se denomina a fenómeno de Koebner, la aparición de placas de psoriasis en zonas de traumatismo.
  • Obesidad no solo aumenta el riesgo, sino que empeora la respuesta al tratamiento. El tejido adiposo es proinflamatorio.

Las síntomas de artritis psoriásica que un dermatólogo puede detectar

Aquí viene lo crucial: los síntomas iniciales de artritis psoriásica son sutiles y fáciles de ignorar o atribuir a "la edad", "el trabajo", "el gym"... Pero para un dermatólogo experto son banderas rojas imposibles de ignorar.

Los síntomas articulares que no debes minimizar

  • Rigidez matutina prolongada. No hablo de 5 minutos de "desperezarse". Hablo de 30-60 minutos donde tus articulaciones parecen oxidadas. Es diferente al dolor tras ejercicio ya que empeora con el reposo y mejora con el movimiento.
  • Dolor e hinchazón articular asimétrica. A diferencia de la artritis reumatoide que suele ser simétrica, la psoriásica puede afectar una rodilla sí y otra no, tres dedos de una mano y uno de la otra. No hay patrón fijo.
  • Dactilitis o "dedos en salchicha". Es tan característico que tiene nombre propio. El dedo entero (no solo la articulación) se inflama, pareciendo efectivamente una salchicha. Puede afectar manos o pies.
  • Entesitis. Inflamación donde los tendones se insertan en el hueso. El talón de Aquiles y la fascia plantar son sitios típicos. Ese "dolor de talón" persistente puede ser más que fascitis.
  • Dolor lumbar inflamatorio. Diferente al mecánico. Empeora de noche, mejora con ejercicio, no con reposo. Puede indicar afectación de articulaciones sacroilíacas o columna.

Las pistas en la piel que anticipan problemas articulares

  • Psoriasis del cuero cabelludo severa. Por razones no totalmente claras, correlaciona con mayor riesgo de artritis.
  • Psoriasis inversa o de pliegues. Axilas, ingles, pliegue interglúteo... Estas localizaciones se asocian más a artritis.
  • Afectación ungueal. Este es clave. Pitting (hoyuelos), onicólisis (separación de la uña), manchas de aceite, hiperqueratosis subungueal... Las uñas comparten origen embriológico con las articulaciones. Su afectación es casi premonitoria.

Síntomas sistémicos que completan el cuadro

  • Fatiga extrema. No es cansancio normal. Es agotamiento profundo que no mejora con descanso. La inflamación crónica consume energía.
  • Uveítis. Inflamación ocular que causa ojo rojo, dolor, visión borrosa. Hasta 25% de pacientes la desarrollan.

manos de una persona con artritis psoriásica

El diagnóstico desde la consulta dermatológica

El dermatólogo tiene una posición privilegiada para detectar artritis psoriásica precozmente, ya que la mayoría de pacientes desarrollan psoriasis años antes que síntomas articulares.

El diagnóstico de artritis psoriásica no es sencillo. No hay un test único que diga "sí" o "no". Es un puzzle donde cada pieza cuenta, y el dermatólogo a menudo tiene las primeras piezas.

En clínicas especializadas como Dermaniac analizamos:

  • Historia clínica dirigida. No solo "¿le duele algo?". Preguntas específicas sobre rigidez matutina, dolor de espalda nocturno, hinchazón articular, historia familiar...
  • Exploración minuciosa. Además de la piel, palpación de articulaciones, búsqueda de puntos dolorosos en inserciones tendinosas, valoración de uñas con dermatoscopio...
  • Cuestionarios validados. PEST, PASQ... herramientas que en 5 minutos identifican pacientes de alto riesgo.
  • Colaboración estrecha con reumatología. Ante sospecha, derivación rápida. El tiempo es oro para prevenir daño articular.

Tratamiento integral de la artritis psoriásica: cuando dermatología y reumatología unen fuerzas

El tratamiento moderno de la artritis psoriásica requiere abordar simultáneamente piel y articulaciones, con terapias sistémicas que han revolucionado el pronóstico de la enfermedad.

Aquí viene la revolución. Hace 20 años, tratábamos la piel por un lado y las articulaciones por otro. Hoy entendemos que es una enfermedad única que requiere tratamiento integral.

Tratamientos para formas leves

En casos leves, donde la inflamación articular es mínima y las lesiones cutáneas son limitadas, se pueden usar tratamientos más conservadores:

  • AINEs (Antiinflamatorios no esteroideos): ayudan a aliviar el dolor y la rigidez en las articulaciones, pero no mejoran la psoriasis. Su uso prolongado puede causar efectos secundarios gastrointestinales, renales o cardiovasculares.
  • Infiltraciones de corticoides: inyecciones directas en articulaciones inflamadas. Son útiles para aliviar síntomas localizados, pero el efecto es temporal.
  • Tratamientos tópicos para la piel: incluyen cremas con corticoides, derivados de la vitamina D o inhibidores de la calcineurina. Funcionan bien cuando la psoriasis es leve, pero no tienen impacto sobre la artritis.

Cuando hace falta ir más allá: tratamiento sistémico

Cuando la enfermedad es más activa o persistente, se necesita un enfoque más potente: los tratamientos sistémicos, que actúan sobre todo el organismo y modifican el curso de la enfermedad.

  • Metotrexato: uno de los tratamientos más utilizados. Mejora tanto la piel como las articulaciones. Se toma semanalmente, pero requiere controles periódicos por posibles efectos en el hígado.
  • Leflunomida: alternativa útil, sobre todo en artritis periférica. También necesita seguimiento médico.
  • Apremilast: un medicamento oral con un perfil de seguridad favorable. No requiere controles de sangre frecuentes, aunque su eficacia es algo más moderada.
  • fármacos biológicos: han transformado el manejo de la artritis psoriásica. Son tratamientos diseñados específicamente para bloquear las moléculas que generan inflamación, y han demostrado una alta eficacia tanto en la piel como en las articulaciones.

¿Cuál tratamiento es el adecuado?

No existe una única respuesta correcta. La elección del tratamiento depende de varios factores:

  • Severidad de psoriasis vs artritis
  • Comorbilidades (obesidad, enfermedad inflamatoria intestinal...)
  • Preferencias del paciente (oral vs inyectable)
  • Respuesta a tratamientos previos
  • Acceso y cobertura

La experiencia en Dermaniac muestra que la personalización es clave. Con tratamiento adecuado, la mayoría de pacientes con artritis psoriásica pueden llevar vidas plenas, activas y sin limitaciones significativas - el futuro es radicalmente diferente al pasado.

Tu piel puede salvarte las articulaciones: no ignores las señales

La artritis psoriásica es una enfermedad silenciosa, pero tratable. Lo más importante es detectarla a tiempo, y ahí tu dermatólogo tiene un rol clave.

Si tienes psoriasis y sientes dolor en las articulaciones, rigidez por las mañanas, hinchazón o fatiga persistente, no lo ignores. No es “parte normal” de tener psoriasis. Es una señal. Y cuanto antes se actúe, mejor será el pronóstico.

En Dermaniac, pacientes que llegaron con dolor y frustración hoy viven sin limitaciones.

👉 No esperes a que el daño sea irreversible. Agenda tu consulta.

Share this post
Psoriasis
Psoriasis
Dra. Elena Vargas, médico colegiada especialista en dermatología quirúrgica, estética y venereología
Dra. Elena Vargas
31/7/2025